Resumo

Por razones principalmente ideológicas, la academia latinoamericana de investigadores de la comunicación permanece indiferente frente a un delicado asunto: las difíciles condiciones de empleo que enfrentan los egresados de escuelas y facultades de comunicación. Las objeciones ideológicas y fundamentalistas no impiden la marcha de la economía del conocimiento. Internet, los nuevos medios y los nuevos ambientes comunicativos resultantes de la irreversible convergencia tecnológica, representan efectivas ventanas de oportunidades para asegurar mejores condiciones de empleo para los egresados de nuestras escuelas y facultades de comunicación. Solo así podremos efectivamente hacer de la comunicación “un campo cargado de futuro”.

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