Las sociedades anónimas deportivas: ¿la panacea del deporte profesional?
Por César Pólit Ycaza (Autor).
Resumo
El crecimiento exponencial del “deporte espectáculo”, especialmente en el ámbito profesional, trajo como consecuencia la necesidad de fortalecer las instituciones que lo promueven y desarrollan, pues sólo aquellas que son bien gobernadas y pueden organizar competiciones atractivas a los espectadores, medios de comunicación y patrocinadores están en capacidad de asegurar la sostenibilidad de sus deportes y de ellas mismas. No hay, por ende, espacio para organizaciones mal manejadas, ni para dirigentes improvisados.
Si bien nuestro tema central son las sociedades anónimas deportivas, modelo aplicado mayoritariamente por los clubes de fútbol profesional, resulta interesante referirnos a uno diferente, como es el caso de la Federación Internacional de Tenis (ITF), constituida como compañía de responsabilidad limitada y no como una organización deportiva tradicional. Ella tiene su domicilio legal en Nassau (Bahamas) y su agente representante registrado es GTC Corporate Services Limited.